Capítulo 7 – La seguridad en el museo. Medidas de seguridad contra robo, agresión e incendio.

  1. Problemas con que se enfrenta la seguridad en los museos.
  2. Medidas de seguridad contra robo:
    1. Categorías de ladrones;
    2. Medidas de protección;
    3. Alarmas;
    4. Control de inventarios.
  3. Medidas de seguridad contra agresiones. El vandalismo.
  4. Medidas de seguridad contra incendios:
    1. Fines;
    2. Medios;
    3. Materiales causantes de incendio;
    4. Prevención en edificios históricos.
  5. La prevención de riesgos en edificios de nueva planta.
  6. Conclusiones y recomendaciones.
  7. Riesgos de los bienes en préstamo.
  8. Bibliografía.
  9. Anexo 5. Condiciones especiales para póliza de exposiciones temporales.

1. PROBLEMAS CON QUE SE ENFRENTA LA SEGURIDAD EN LOS MUSEOS

El legado cultural de la humanidad ha sufrido pérdidas extraordinarias como consecuencia de robos y malversaciones, actos de vandalismo y deterioros ambientales, incendios e inundaciones. La urgente necesidad de poner fin a estas pérdidas llevó a la creación, en 1974, del Comité Internacional para la Seguridad en los Museos (ICMS), dependiente del Consejo Internacional de Museos (ICOM), y a la subsiguiente redacción, dos años más tarde del libro de Robert G. Tillotson, La seguridad en los Museos[1].

La seguridad en los museos encierra numerosos problemas que no aparecen en otros campos:

  1. la necesidad de preservar la herencia artística, histórica y científica de la civilización para las generaciones futuras;
  2. y al mismo tiempo mantenerla expuesta en beneficio del presente;
  3. todas las instalaciones que entran en la denominación de «museo», están situadas en áreas con condiciones climáticas, régimen político o población muy diferentes;
  4. la dificultad obvia de mantener una actualización, a nivel internacional, de los constantes progresos en cuanto a equipos técnicos y sistemas de protección contra incendios y robos.

2. MEDIDAS DE SEGURIDAD CONTRA ROBO

A. Categorías de ladrones:

Según Tillotson, existen dos grandes categorías de ladrones: los ladrones profesionales que esperan obtener un rescate del propietario, del museo o de la compañía de seguros; y los ladrones, aficionados o profesionales, e incluso los comerciantes de obras de arte poco escrupulosos, que esperan revender el objeto a menudo en otra localidad o país.

B. Medidas de protección:

Las medidas de protección para luchar contra ello afectan: al equipo técnico; a la protección: periférica o exterior al edificio, interior al mismo, de los objetos conservados (expuestos y en reservas) y trampas de protección; y a los sistemas auxiliares: control de rondas, alarmas de atraco pánico, cintas registradoras de llamadas telefónicas, circuito interno de televisión etc.

C. Alarmas:

Las alarmas pueden hacerse notar en tres diferentes dimensiones:

  • local: con señales sonoras o visibles in situ;
  • en conexión con los departamentos de bomberos o de policía, con las objeciones frecuentes de condensación de señales y falsas alarmas que a ellos llegan;
  • puesto central de vigilancia, que recibe las señales de los equipos técnicos instalados en el museo, selecciona las alarmas reales y avisa a los servicio de bomberos o policía, si ha lugar para ello; suele estar alejados del museo y utiliza el sistema de «abonados».

D. Control de inventarios:

El control permanente de los fondos de un museo por medio de un inventario, no es sólo una exigencia del museo como centro de documentación e investigación científica que es.

El inventario provee de un instrumento contra el robo; ayuda a detectar la ausencia inmediata de un objeto de esos fondos; y aporta información descriptiva para recobrarlo en caso de robo.Los componentes de dicho control  son las fichas descriptivas, con su número de registro; las fichas fotográficas y escritas; el control de movimiento interior: registro de localización, recibos; las inspecciones de control en exposición y almacenes; y el control de movimiento exterior: en préstamo y tránsito.

Si por motivos inevitables, las posibilidades del personal para realizar los trámites mencionados son limitadas, deberán, como mínimo, cumplirse los siguientes requisitos:

  1. Para cada objeto deberá hacerse una descripción, un informe sobre su estado, una breve mención sobre sus particularidades decorativas o de fabricación y una fotografía.
  2. La verificación semestral de la presencia de cada objeto, en salas de exposición y en almacenes
  3. El registro de entrada en almacenes
  4. Fotografías de todos los objetos expuestos e inspección diaria de los mismos por un responsable
  5. Cada objeto que se halle en tránsito será controlado en su llegada a los puntos intermedios y a su destino final
  6. En cuanto a los objetos en préstamo, la institución receptora debe proporcionar periódicamente informes y fotografías indicando el estado y emplazamiento del objeto.

3. MEDIDAS DE SEGURIDAD CONTRA AGRESIONES. VANDALISMO

Isabel Bravo Juega, estima que el vandalismo es el riesgo más difícil de combatir en un museo, debido a la imprevisión del acto vandálico[2].

El contacto directo del visitante con la obra supone un alto grado de vulnerabilidad para la misma.

La palabra «vándalo» debe reservarse al individuo que deteriora una obra intencionadamente. El «mal educado» puede ser evitado, simplemente con una concienciación del público sobre el daño que puede causar a una pieza el roce continuo; con el mantenimiento de una limpieza y orden en las salas de exposición y con una continua atención del vigilante de sala.

Pero el vándalo propiamente dicho no es fácil de evitar, pues su conducta obedece a una alteración psíquica, una motivación política, una finalidad propagandística y la tensión de la sociedad moderna, que pueden dar lugar a distintas formas de comportamiento destructivo. Dado que las causas pueden ser múltiples, por ello mismo se hace más difícil su previsión y eliminación.[3]

Las soluciones adoptadas para luchar contra tales actos vandálicos suelen pasar por impedir el contacto directo del espectador con la obra (así, suelen emplearse recintos de cristal blindado, se establecen corredores con paredes de cristal de paso obligatorio etc.) Estas soluciones no tienen nada que ver con los fines educativos y culturales del museo.

A pesar de la dificultad de prevenir el vandalismo, es posible adoptar medidas para no facilitarlo, como evitar el acercamiento excesivo a la obra[4]; mantener el orden absoluto y la limpieza en las salas; situar los objetos excitantes emocionalmente detrás de vitrinas; procurar mantener una atención extrema ante cualquier visitante sospechoso; retirar inmediatamente los objetos dañados; cuidar la publicidad sobre actos vandálicos en el propio museo; retener los objetos de los visitantes a la entrada del museo; controlar el número de visitantes, etc.

4. MEDIDAS DE SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS

Según Tillotson, el fuego es el enemigo número uno de los museos, ya que por lo general los daños que causa son irreparables.

A. Fines:

Los fines más directos de la protección contra el fuego son :

  • impedir que el fuego se produzca;
  • detectar su presencia;
  • evitar que se extienda;
  • y extinguirlo con el mínimo daño para las personas y colecciones que se encuentran en el museo.
    Vista la complejidad de este tema y la continua investigación y perfeccionamiento de los aspectos técnicos de la prevención de incendios, debe consultarse una fuente de información completa y actualizada. La más útil es la National Fire Protection Asociation (NFPA).

B. Medios:

Los medios para luchar contra el fuego son de distinta naturaleza:

  • preventivos: reglamentos
  • detectores: alarmas y señales; detectores: térmicos y de humo
  • procedimientos para la extinción: automáticos (nebulizadores de agua, dióxido de carbono y polvos químicos); y otros (agua, mangueras, extintores manuales, evacuación automática del humo ).

C. Materiales causantes de incendio:

Los tipos de incendio son causados por los siguientes materiales:

  • Clase A: combustibles ordinarios (papel, textiles, madera), que pueden extinguirse por enfriado, sofocación (con polvos químicos) o humectación (con agua pulverizada).
  • Clase B: aceites, grasas, pinturas y líquidos inflamables, que pueden extinguirse por sofocación.
  • Clase C: equipos eléctricos en actividad, que requieren un agente extintor no conductor

D. Prevención en edificios históricos:

Numerosos edificios y monumentos históricos que han sido acondicionados para museos, no fueron diseñados como edificios públicos. En estos casos deben seguirse estrictamente las normas establecidas sobre límites de ocupación y número de salidas requerido.
He aquí algunas recomendaciones destinadas a ellos:

  • deben disponer de buenos accesos para los bomberos;
  • pueden colocarse aspersores disimulados;
  • los materiales combustibles pueden reemplazarse con otros incombustibles que los imiten;
  • las chimeneas deben revestirse con materiales refractarios;
  • las conducciones eléctricas deben ser revisadas a conciencia.

5. PREVENCIÓN DE RIESGOS EN EDIFICIOS DE NUEVA PLANTA

Tillotson señala que si es posible elegir el emplazamiento del museo, este deberá reunir las condiciones siguientes:

  • accesibilidad;
  • cercanía a los cuarteles de bomberos y policía;
  • precaución respecto a los edificios anejos;
  • protección contra inundaciones, vibraciones y terremotos;
  • iluminación del exterior del edificio;
  • ausencia de árboles y setos en derredor para eliminar posibles escondrijos;
  • líneas eléctricas duplicadas;
  • y no debe haber barreras arquitectónicas.

En cuanto al sector público  indica que:

  • las puertas de entrada-salida se reducirán al mínimo exigido;
  • cada una de ellas tendrá un puesto de guardia;
  • las puertas exteriores tendrán llaves diferentes;
  • en las puertas de entrada habrá información suficiente para no distraer a los vigilantes con preguntas;
  • amplios vestíbulos de entrada y desde ellos acceso a los servicios públicos;
  • en el interior habrá elementos orientadores y espacios abiertos;
  • las puertas del área privada se controlarán;

Los sectores cerrados al público  se protegen mejor si están separados por barreras arquitectónicas:

  • se dividirán en dos áreas: una para maquinaria, servicios de seguridad y salas de personal ; otra con los almacenes, registros, salas de restauración, preparación de exposiciones, investigación y oficinas;
  • almacenes y cajas fuertes estarán situados en el interior del edificio;
  • salas de almacenaje pequeñas y numerosas, para evitar amontonamientos y expansión de incendios;
  • la protección contra robo e incendio será equivalente a la existente en el museo;
  • entrada independiente para el personal del museo y para el material;
  • las áreas de embarque y descarga estarán en el interior del edificio y se harán las operaciones a puerta cerrada.

En general  se emplearán materiales no inflamables en la construcción, que al mismo tiempo sean seguros y de alta calidad.

Todos los sistemas de control serán supervisados desde un solo punto y una persona.

6. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

Isabel Bravo Juega sitúa el estado del problema de este modo:

  • los programas de seguridad son, en general, inadecuados a las ampliaciones producidas en los museos;
  • la concienciación de la necesidad de planificar la seguridad del museo, generalmente, viene después de producirse un desastre.

Y concluye finalmente:

  1. En cuanto a las responsabilidades:
    • las responsabilidades deben estar claramente fijadas, para que la acción de cada miembro encaje en un conjunto de medidas de seguridad;
    • es conveniente la existencia de una persona o equipo encargado de planificar y coordinar las medidas de seguridad;
    • es conveniente disponer de un servicio de vigilantes especial para las horas de la noche.
  2. Sobre el control de las piezas:
    • la ficha de inventario debe de estar duplicada y el original depositado en cabinas a prueba de fuego, humedad y con acceso estrictamente controlado;
    • para verificar su presencia, es conveniente disponer de fotografías de estas con la distribución usual de los objetos;
    • sólo se permitirá la salida externa del objeto si las condiciones de seguridad y conservación de su nueva ubicación son equivalentes o superiores al museo del que proceden.
  3. Sobre el control del movimiento interno del personal:
    • debe analizarse minuciosamente la integridad moral y psíquica de toda persona susceptible de ser contratada por el museo;
    • el personal debe presentar una tarjeta de identificación en entradas y salidas;
    • control de las entradas de objetos;
    • debe darse preferencia a la protección contra incendios.

INCENDIO:

La prevención del incendio comienza en los planos del arquitecto:

  • el tratamiento adecuado de un posible incendio empieza por la prevención;
  • si no se logra evitar el nacimiento de un incendio, es preciso prever los mecanismos necesarios para su detección y extinción;
  • las medidas de detección, resistencia al fuego, evacuación y extinción deberán ser previstas por el arquitecto.

La detección y transmisión de la alarma facilitarán la intervención inmediata:

  • el conjunto de detectores y el puesto de control se encuentran enlazados por una red de conductores eléctricos. El puesto de control debe ser autovigilado;
  • aunque no exista ningún detector de uso universal, parece ser que el más generalizado es el detector iónico;
  • es conveniente complementar las instalaciones automáticas de detección con redes de pulsadores manuales y de alarma.

Una vez transmitida la alarma, la primera medida a tomar será la extinción:

  • evitar en ese momento los robos;
  • los tipos de extintores considerados como más útiles para museos son los de agua pulverizada y polvo químico polivalente;
  • las instalaciones de extinción automática de agua no son recomendables para las salas de exposición (aunque el agua no es tóxica).

Un plan de emergencia establecido de antemano facilitará una acción coordinada:

  • un plan que incluya evacuación de personas y obras;
  • realizar periódicamente ejercicios de entrenamiento en manejo de extintores, evacuación, etc.

ROBO E INTRUSIÓN:

Será muy útil un estudio de posibles motivaciones, autores y formas de actuar de los ladrones, en particular el conocimiento del mercado ilícito.

La organización de la vigilancia atenderá a salas de exposición y reservas, a los accesos usuales y no usuales del edificio

Otros consejos para la protección: es aconsejable instalar circuito cerrado de TV, protección electrónica, luces de emergencia ante sabotajes y mantener adecuadamente las instalaciones para que no fallen. Para que una instalación anti-robo sea eficaz, deberá ser sencilla, inviolable y entretenida de una forma sistemática. El sistema de vigilancia óptimo será aquel en que se combinen varios sistemas de detección

En caso de robo debe intervenir inmediatamente la policía, es preciso seguir sus consejos de actuación y facilitarle cuantos datos sean precisos, a partir del inventario de las piezas y su fotografía antes del robo.

7. RIESGOS DE LOS BIENES EN PRÉSTAMO

Lo expuesto se refiere a la seguridad de los bienes del museo in situ, pero es una realidad que  parte de éstos viajan con frecuencia debido a las solicitudes de préstamo que se reciben. Cuando el préstamo de una obra es aprobado, el riesgo –entendido como la posibilidad de que ocurra un acontecimiento incierto fortuito y de consecuencias dañosas- de su deterioro, incluso pérdida, aumenta considerablemente. Es preciso, entonces, evaluar estos riesgos a título preventivo para evitar el siniestro.

Esta evaluación supone identificar los riesgos que sufre la obra prestada a lo largo del proceso de manipulación, embalaje, depósitos transitorios, tránsitos, instalaciones y montajes, así como depósitos temporales exigidos por su desplazamiento, dentro, además, del flujo cambiante de iluminación, humedad relativa y temperatura implícitos en su itinerancia.

Tras esta evaluación surge la necesidad de definir un plan de actuación, con las fases operativas siguientes[5]:

  1. Planificación de las determinaciones tendentes a minimizar los riesgos[6]: se definirán las responsabilidades contractuales de la cesión en préstamo y la naturaleza del objeto prestado; se considerará el equilibrio ambiental del objeto en préstamo antes de su partida para garantizar los mismos niveles de HR y T en destino; se definirán el modo y tipo de manipulación del objeto, su embalaje[7] y el medio de transporte, la existencia de correos y documentación en tránsito, los periodos de depósitos transitorios, las medidas de seguridad no sólo físicas y electrónicas de los centros expositivos (facilitadas a través de los informes de servicio, facility report), sino también los planes de contingencia y evacuación, sin obviar el análisis pormenorizado de la póliza de seguro exigida por el cedente, así como el impacto político-social que la muestra pudiera tener en algunos sectores de población.
  2. Evaluación de las capas de frecuencia e intensidad en términos económicos: entendiendo por capas de frecuencia aquellas donde el siniestro emerge repetitivamente y por unas cuantías económicas irrelevantes (daños en marcos y cristales u otros elementos de soporte o protección, que no son considerados por las aseguradoras como inherentes a la obra artística y cuyos daños están exentos de demérito), prestando especial atención a aquellas pérdidas de intensidad puntual que acotarán la pérdida máxima probable en términos aseguradores (por ejemplo el daño sufrido por una pieza de un conjunto o colección), en cuyo caso el demérito legal podría girar sobre la totalidad.
  3. Plan integral de seguridad: una vez definido el perfil de riesgos potenciales y evaluadas sus capas de frecuencia e intensidad, el plan integral de seguridad nos permite tratar adecuadamente las áreas más vulnerables de la operativa, ajustando el proyecto al riesgo específico y buscando la optimización del binomio seguridad/costo. Es aquí donde conviene analizar las situaciones de emergencia que puedan darse, por ejemplo, paralizaciones en tránsito por avería o accidente de circulación, problemas aduaneros por defectos documentales u otras causas.
  4. Transferencia contractual a terceros no aseguradores: es preciso analizar la cadena de entidades imbricadas en el proceso expositivo, cuya actuación implica un riesgo objetivo potencial frente a terceros comunes, que les llevaría a verse implicadas como responsables civiles subsidiarias o solidarias.
  5. Transferencia a coberturas aseguradoras: es tras este proceso cuando el beneficiario del préstamo (prestatario), de acuerdo al perfil de riesgos existente, deberá formalizar el contrato de comodato con el prestador (propietario de la pieza)[8], que regule la responsabilidad del uso del bien, transfiriendo los riesgos derivados del mismo a una Compañía de Aseguradora a través de un contrato de seguros documentado en una póliza. (Véase en Anexo 5. Condiciones especiales para póliza de exposiciones temporales).

¿Qué hacer cuando se produce el temido siniestro? Ante todo conviene determinar que se entiende por siniestro: es el acaecimiento de un evento previsto en el contrato de seguro, dando lugar al cumplimiento de las obligaciones contractuales derivadas del mismo por parte del Asegurador.

El asegurado o tomador de la póliza deberán notificar el siniestro directamente a la Compañía Aseguradora en el plazo de siete días desde el conocimiento del mismo. El Asegurador está obligado a satisfacer la indemnización al término de la peritación o en el plazo máximo de 40 días. De no haber acuerdo, cada una de las partes designará un perito, que, de llegar a un acuerdo, se documentará mediante un acta conjunta. Si persiste la discrepancia, las partes nombrarán un tercer perito de común, quedando como recurso final los Tribunales de Justicia[9].

LISTA DE CHEQUEO DE RIESGOS EN ACTIVIDADES EXPOSITIVAS
Según José María Franco. “Tratamiento asegurador y perfil de riesgos”
Riesgos de
Desaparición:
Robo
Atraco
Hurto
Extravío
Sustitución
Infidelidad (hurto interno)
Riesgo de
Agresión:
Agentes
Medio / ambientales
Humedad relativa
Luz
Contaminación atmosférica
Temperatura
Agentes externos
físicos
Incendio Abrasamiento / Humo
Daños agua
Explosión Por fuentes de energía
Bombas o artefactos explosivos
Hundimiento
Inadecuación de embalaje
Personales Actos vandálicos Agresiones: Físicas / Químicas
Negligencia Tactos
Impacto físico
Actuaciones infantiles
Manipulación técnica en: Embalaje /
Transporte / Carga / Estiba / Descarga /
Desplazamiento / Instalación
Daños por proceso de: Evacuación /
Contingencia / Disturbios

8. BIBLIOGRAFÍA

BOSTICK, William A. Guide pour la securité des biens culturels. Paris, UNESCO, 1978. Col. «Cahiers techniques : musées et monuments».

BRAVO JUEGA, Isabel. Un capítulo fundamental de la museología: la seguridad en los museos.  Madrid, ANABAD, 1982.

BURKE, Robert B.-ADELOYE, Sam. A manual of basic museum security. Leicester, ICOM, 1986. 125 pp.

BUTCHER-YOUNGHANS, Sherry. Historic house museum. A practical handbook for their care, preservation, and management. New York-Oxford, Oxford University Press, 1993. 269 pp.

FENNELLY, Lawrence J. Museum, archive and library security. Boston-London, Butterworths, 1983.

FITZMAURICE MILLS, John. Los conservadores de obras de arte. […], Centro de Información para Médicos, 1977. Ver desastres naturales p. 96 y ss.

FRANCO, José Martín. “Tratamiento asegurador y perfil de riesgos”, en RICO, Juan Carlos (ed.). Los conocimientos técnicos. Museos. Arquitectura. Arte. Madrid, Sílex, 1999. Pp. 433-460. [Riesgos en actividades expositivas]

GARCÍA FERNÁNDEZ, Isabel María. La conservación preventiva y la exposición de objetos y obras de arte. Murcia, Edit. KR, 1999. Cap. 6 [La seguridad en la conservación preventiva]

MANISCALCO, Fabio. World Heritage and War. Napoli, Massa, 2007.

STOVEL, Herb. Preparación ante el riesgo. ICCROM, 2003.

TILLOTSON, Robert G. La seguridad en los museos. Madrid, Ministerio de Cultura, 1980. [Edición bilingüe franco-inglesa aparecida en París, 1977, bajo el patrocinio de ICOM]

Véase también la Bibliografía General.

ANEXO 5
CONDICIONES ESPECIALES PARA PÓLIZA DE EXPOSICIONES TEMPORALES
Según José María Franco.”Tratamiento asegurador y perfil de riesgos”, 1999

Objetos asegurados

Objetos de Arte o de Interés Histórico Artístico y/o Cultural, debidamente acondicionados según su uso y naturaleza.

Ámbito de la cobertura

Los objetos asegurados quedarán cubiertos contra los riesgos que más adelante se describen en el apartado Riesgos Cubiertos, durante el periodo de vigencia de la Póliza, en las siguientes situaciones:

Durante estancias:

En centros expositivos, dispuestos a tal efecto por los organizadores, a cuya custodia hayan sido confiados los objetos asegurados.

Durante el transporte:

En operaciones de embalaje, desembalaje y manipulación.

En operaciones de carga, descarga y manipulación e instalación.

En el curso de viajes, propiamente dicho.

En estancia, en lugares adecuados, que fuera preciso utilizar en el curso de cualquiera de las operaciones anteriormente mencionadas.

Otras situaciones:

En general, en cualquier otra situación en que pudieran estar los objetos asegurados tales como locales de embaladores, restauradores, aduanas,  etc., siempre y cuando en dichas situaciones se hayan tomado las adecuadas medidas de seguridad.

A efecto de lo indicado en este apartado y como aclaración, se señala que la cobertura que otorga el presente contrato, en cuanto a viajes, se establece bajo la fórmula de CLAVO A CLAVO[10].

Riesgos cubiertos

El presente Contrato queda extendido para garantizar Todo Riesgo de Pérdida y/o Daño Físico ocasionado por cualquier causa externa que sufran los objetos asegurados con motivo de su transporte, manipulación y estancias, de acuerdo con las Cláusulas Inglesas que se adjuntan y aplicadas al medio de transporte de que se trate:

  • INSTITUTE CARGO CLAUSES (A)
  • INSTITUTE WAR CLAUSES (CARGO)
  • INSTITUTE STRIKES CLAUSES (CARGO)

Se une a título informativo la traducción de las citadas cláusulas[11]. Se entiende derogada la Cláusula 19 de la I.C.C. (A) y la 14 de las I.W.C. (CARGO) e I.S.C. (CARGO). En consecuencia el presente contrato queda sometido a la Ley y Jurisdicción Española.

Así mismo, se hace constar que dentro de la presente cobertura está incluida la Depreciación o Demérito Artístico que sufran las obras a consecuencia de un accidente garantizado, siempre y cuando el importe de la restauración o reparación sumado al de la pérdida de valor no excediera el importe correspondiente al valor asegurado del objeto de que se trate[12]. Todo ello con la limitación que para Colecciones se establece en el apartado “DESCABALAMIENTO”, de estas Condiciones Particulares.

No se responderá de la rotura de cristal, pero se incluyen los daños ocasionados por tal motivo a la Propiedad Asegurada. Cuanto antecede será de aplicación sólo para pinturas, dibujos, obra gráfica, fotografía y, en general, cualquier objeto artístico cuya naturaleza de interés no sea el propio cristal, en cuyo caso estaría cubierto.

Se hace expresamente constar que esta Póliza NO CUBRE “Cualquier pérdida y/o Daño Físico a la Propiedad Asegurada causado o como resultado directo de trabajos realizados durante el curso de alteraciones, retocado, renovación, reparación, restauración, re-enmarcado o proceso similar”.

Descabalamiento

En caso de averías o daños parciales o totales de un objeto u objetos que formen parte de una colección, la indemnización que por tales daños debe responder la Compañía Aseguradora, se limitará a los gastos de restauración de cada objeto dañado unitariamente, con límite del valor del objeto dañado.

En consecuencia, la Compañía no asumirá el demérito que pudiera producirse en una colección completa por daños parciales o totales de algunos de los objetos que formen parte de dicha colección.

Medios de transporte

Los objetos asegurados podrán ser trasladados en cualquier medio de transporte, siempre y cuando en dichos medios se hayan adoptado las oportunas medidas de seguridad, tanto del propio medio como de acompañamiento del mismo.

Embalaje

Se hace expresamente constar que el embalaje y manipulación de las obras de arte aseguradas deberán realizarse por personal especializado.

Exposiciones y estancias

Es necesario que el lugar donde se realicen las estancias y/o depósitos esté dotado de las oportunas medidas de seguridad físicas, electrónicas y organizativas adecuadas a la finalidad del mismo.

Garantía de divisas

Cuando la valoración de los objetos asegurados sea realizada en divisas y aún cuando la prima correspondiente sea liquidada por su contravalor en [euros], la Compañía Asegurada indemnizará los siniestros a los propietarios de las obras, en divisas, siempre y cuando la autoridad competente lo autorice.

Límite de responsabilidad

La responsabilidad máxima de la Compañía Aseguradora para las garantías acordadas por esta Póliza, será el valor total de los objetos que se describen en relación anexa.

Franquicia

Los siniestros con cargo a esta Póliza, se liquidarán sin deducción de franquicia alguna.

Beneficiarios

En caso de siniestro se considerará como beneficiario, a efectos de indemnización, al Propietario o propietarios que puedan acreditarse como tales, de los objetos asegurados.

Subrogación de derechos

La Compañía Aseguradora se considerará subrogada en todos los derechos del Asegurado o Propietarios de las Obras Aseguradas, contra terceros causantes o responsables de un siniestro, salvo en lo que se refiere a organizadores, transportistas, embaladores y sus dependientes, con respecto a los cuales renuncia expresamente a todo recurso que tuviera derecho a ejercitar, excepto cando los daños indemnizados hayan sido causados por negligencia grave o conducta dolosa de cualquiera de dichas personas.

Quedan nulas y sin valor ni efecto alguno, las Condiciones Generales impresas de la presente Póliza, en cuanto contradigan a las condiciones mecano escritas que anteceden.

Cláusula de exclusión por contaminación radioactiva

Esta Cláusula sustituirá y anulará cualquier aspecto contenido en este Seguro contrario a ella.

En ningún caso este Seguro cubrirá la responsabilidad por pérdida o daño o los gastos directa o indirectamente causados o contribuidos o porque surjan de:

Radiación de iones o contaminación por radioactividad de cualquier combustible nuclear o cualquier deshecho nuclear o de la combustión de combustible nuclear.

La radioactividad, toxicidad, explosivos u otras materias peligrosas o contaminantes de cualquier instalación nuclear, reactor u otra unión nuclear o componentes nucleares de la misma.

Cualquier arma nuclear de guerra que utilice fisión y/o fusión nuclear atómica u otro tipo de reacción o fuerza o materia radioactiva.


NOTAS (Puedes hacer clic en los números de las notas [X] para desplazarte entre la nota y su llamada)

[1] París, ICOM, 1977.

[2] Un capítulo fundamental de la museología: la seguridad en los museos. Madrid, ANABAD, 1982. Es posterior en dos años al trabajo de Tillotson. Memoria de licenciatura en Letras de su autora, tras sus estudios de museología en la Academia de Bellas Artes de Roma.

[3] Casos famosos de vandalismo han sido los dirigidos contra «La Virgen y el Niño» de Van der Weyden en el Museo del Prado (1968), la «Pietá» de Miguel Ángel Buonarrotti en San Pedro del Vaticano (1972) y «La ronda nocturna» de Rembrandt en el Rijkmuseum de Amsterdan (1975).

[4] La negligencia de los vigilantes de sala es causa frecuente de agresiones como tactos, impactos físicos no intencionados, actuaciones infantiles, desperfectos ocasionados con bolígrafos, grafittis realizados con rotuladores etc.

[5] FRANCO, José Martín. “Tratamiento asegurador y perfil de riesgos”, en RICO, Juan Carlos (ed.). Los conocimientos técnicos. Museos. Arquitectura. Arte. Madrid, Sílex, 1999. Pp. 433-460.

[6] Resulta obvio resaltar que la seguridad total no existe, y que el coste de una seguridad cuasi total hace en términos prácticos a ésta inviable.

[7] La inadecuación por insuficiencia de embalaje es la mayor causa de siniestralidad, siendo esta circunstancia causa de conflictos posteriores con la  Compañía Aseguradora.

[8] El Art. 1745 del Código Civil vigente en España lo define como un contrato de gratuidad en el cual el comodatario (prestatario) recibe un bien no fungible para su uso por un tiempo definido del comodante (prestador, hasta cuya devolución todas las obligaciones ordinarias de carácter económico recaerán única y exclusivamente en el primero, entre otras y como esencial la de conservar el objeto de préstamo, asumiendo cuantos gastos se deriven de la obligación de devolver el bien al término del contrato y conforme a las condiciones que en el mismo se estipulen o, en su defecto, por pérdida aún por causas fortuitas, el precio de tasación del mismo, de no haber pacto en que expresamente se le exima de responsabilidad.

[9] Según la Ley 50/80, de 8 de octubre de 1980, de Contrato de Seguro.

[10] Denominación de uso corriente para determinar el principio y fin del préstamo: desde cuando la obra (el cuadro, por ejemplo) se descuelga para ser transportada a su nuevo destino temporal, a cuando vuelve a colocarse en su sitio original (la escarpia de la que pendió) una vez pasada su exposición temporal.

[11] Institute Cargo Clauses: cubre los riesgos derivados de la carga, descarga, transporte e incluye los riesgos de mojaduras, humedad y humedad ambiental. Institute War Clauses: prevé las consecuencias derivadas del estallido de una guerra, aunque pueda comprender la cláusula de exclusión por contaminación radioactiva.  Institute Strikes Clauses: cláusula para la cobertura de los riesgos de huelgas en el seguro de mercancías y/u otros intereses del cargador

[12] Se entiende por demérito artístico el desmerecimiento o pérdida de valor que sufre la obra tras un accidente que afecta a su integridad, y que su restauración solo palia en parte.